Nueva York, 6 feb (PL) Un inestable panorama en las bolsas acapara la atención hoy de los operadores de mercado, preocupados por el impulso negativo de Wall Street y las consecuencias en otras cotizaciones de valores en el mundo.
Tras la caída del mercado estadounidense, la Bolsa de Tokio, al igual que los mercados de China, Hong Kong y las acciones australianas, comenzaron el martes a la baja.
Ello ocurre un día después de la estrepitosa caída que sufrió Wall Street.
El índice Hang Seng de Hong Kong cayó 3,24 por ciento en los primeros minutos de negociación, mientras que el CSI 300 de China bajó 1,47 por ciento, y el Compuesto de Shanghái declinó dos por ciento.
Las acciones australianas, en tanto, también sufrieron una caída. El índice de referencia local S&P/ASX200 bajó 165,1 puntos (2,74 por ciento).
Durante las primeras horas de esta jornada exhibieron las bolsas debilidad en todos los sectores, incluyendo la banca, la energía, el petróleo y la minería.
A su vez, en la bolsa de Tokio el índice Nikkei 225 cayó casi mil puntos en los primeros minutos de negociación del martes.
El índice Nikkei respondió a la presentación comercial con un descuento de 914,28 puntos (4,03 por ciento) a un nivel de 21,767.80 puntos. El Topix perdió 73,81 puntos o 4,05 por ciento, a mil 749,93 puntos.
Por su parte, el índice Dow Jones decreció temporalmente casi mil 600 puntos, la mayor caída de su historia en un solo día que desató el pánico en la Bolsa de Nueva York.
La Casa Blanca se mostró confiada este lunes en la situación económica de Estados Unidos, a pesar del desplome de Wall Street.
El presidente estadounidense, Donald Trump, se enfoca en los fundamentos económicos a largo plazo que continúan siendo excepcionalmente fuertes, dijo la portavoz Sarah Sanders.
No obstante esas declaraciones de optimismo, los economistas tienen la mirada puesta en este problema de las bolsas que puede tener una tendencia tipo dominó, con pérdidas en varias partes del planeta.